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"No lo digo porque tenga escasez, pues he aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación. Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad. Todo lo puedo en Cristo que me fortalece." Filipenses 4:11-13
Pablo experimentó muchos sufrimientos sirviendo al Señor, él estaba en la cárcel cuando escribió estas palabras. El contentamiento tiene que ver con la gratitud constante, porque a pesar de momentos tristes, tú sabes que te irá bien porque Dios está contigo, y si Él es contigo ¿quién contra ti? ¿Te das cuenta que el origen de tu contentamiento no está en lo bienes materiales que puedas tener SINO A QUIÉN TIENES EN TU CORAZÓN. El que tú estés contento ayuda a los que están a tu alrededor y también a tu salud “El corazón alegre constituye buen remedio; mas el espíritu triste seca los huesos” Proverbios 17:22
Si tú no miras desde la perspectiva de Dios, no aprenderás a vivir contento. Ahora, pon atención a la enseñanza que nos da Pablo acerca del contentamiento. Tienes que "APRENDER" a contentarte. Pablo dijo "He aprendido a contentarme cualquiera que sea mi situación."
El contentamiento no es algo automático, de ser así, no podría haber dicho que lo había aprendido. Tienes que tener presente que el contentamiento no depende de las circunstancias. Tu vida y la mía tienen momentos tristes y también alegres, pasamos en algún momento escasez y en otros tenemos abundante provisión. Pablo expresa que su contentamiento es continuo y no temporal, su testimonio nos dice que su contentamiento no dependía de las circunstancias.
Cristo es el Único que puede ayudarnos en esta bendita experiencia del contentamiento, independientemente de que seamos ricos o pobres, que tengamos buena salud o estemos enfermos, que seamos jóvenes o adultos. El secreto es Jesucristo. Confía en Él en toda circunstancia. "Todos los días del afligido son difíciles; Mas el de corazón contento tiene un banquete continuo”. Proverbios 15:15
¡A partir de ahora tienes "que aprender" a contentarte en todo tiempo! ¡Dios te quiere contento!
Con aprecio y amor.
Hernando y Mary Aparicio